Notas / Leer a Max Weber

Qué bueno es leer a Max Weber. Qué fácil se pasa por su lectura siendo el neófito en muchos asuntos que trata. Hay libros en los que espero el prólogo la introducción o las notas con la idea de a veces enterarme de qué van; sin embargo, en los libros de Max Weber es completamente distinto. Cada nota cada enunciado escrito por un autor distinto a él se convierte en un obstáculo en la lectura. Ya no se escribe así y a la gente no se preocupa mucho de hacerse entender sino de poner entre líneas su vanidad.

Qué bueno es leer y encontrárselo entre los textos, a él mismo, no demasiado solo un poco habla de él, de vez en cuando un breve comentario sobre su edad, sobre su manera particular de esperar con paciencia a que el mundo le dé la razón. No sucedió así o tal vez no ha sucedido aún, pero leerlo es parte de un ejercicio tal vez fundamental en nuestros días para entender muchas cosas del mundo que he contados por otra persona o de otra manera serían totalmente un coñazo.

No mucha gente puede hacer una historia de ese concepto abstracto que entendemos como funcionario público y lograr que sea pasable.