Notas / Las honradas
Alejandro Cernuda, Cienfuegos: 16/8/2024
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A la primera parte están ligadas nuevamente escenas campestres: un cielo dilatado, una planicie verde, largos días de sol o de lluvia, en medio de una naturaleza tan feraz que desaparecíamos en medio de ella como puntos perdidos y próximos a ser devorados por sus olas de vida
Pesa el sabor fresco y casi íntimo de la novela en ocasiones victoria o Miguel de Carrión se extravían en pasajes más externos que le dan un toque una pizca de sal a la novela tal vez, para un paladar como el mío, aún escaso.
Esa es una novela de las circunstancia presentes sin ningún interés en la posteridad. Alicia Graciela Fernando Joaquín Pedro Arturo y la misma victoria son personajes arquetípicos de una época pasada ya. Poco queda de ellos salvo algunos giros del lenguaje.
La historia está contada por Victoria quien es una chica de familia de clase media venida a más gracias a un falso rumor al final de la guerra de independencia al padre se la acusa de haber quemado sus plantaciones en favor de los insurgentes y haberse ido al campo de batalla cosa para nada cierta pero que aprovechó al fin de la guerra estando de parte de los ganadores para asumir un puesto en la administración en La Habana lo cual conllevó a que se mudara a la capital con toda su familia.
Victoria la cual convierte el texto en un catálogo de la moralidad y una bitácora de su propia experiencia con un mundo de aprendizajes al filo entre la honradez que postula y la impureza que la asedia por todas partes su aspecto casi de mártir se traduce en uno de los mejores ejemplos a seguir por cualquier señorita bien de la época. Es una especie de madame Bovary tropical sólo que contaba en primera persona para bien o para mal.
También he estudiado atentamente a los hombres y a las otras mujeres, comenzando por los que tenía más cerca. El resultado ha sido conclusiones bien originales acerca de la verdad y de la vida que no sé si llegaré a consignar en estas memorias.
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